El Air Force One es un VC-25A es bueno, de hecho son dos aviones, adaptados específicamente a as necesidades del presidente de los Estados Unidos partiendo de la base de dos 747-200. Estos aviones tienen casi 37 años de antigüedad y pronto serán sustituidos por los VC-25B, basados en el 747-8I. Aunque de momento se desconoce, es de suponer que los nuevos aviones también tendrán una sección para invitados, algo que está trayendo quebraderos de cabeza a la Casa Blanca.
Ladrones a bordo del Air Force One
A tal punto ha llegado este asunto, que la Asociación de Corresponsales de Prensa de la Casa Blanca ha tenido que emitir un comunicado interno que ahora ha sido desvelado por Politico y cuyo contenido es, cuanto menos, vergonzoso.
En dicho comunicado se recuerda a aquellos que tienen el privilegio de volar en el avión presidencial de los Estados Unidos que este no es una tienda de souvenirs gratuita y que los objetos sustraídos pertenecen al gobierno norteamericano, desde las tazas a las almohadas.
Es frecuente que cuando el presidente se desplaza a algún sitio, se invite a un pequeño grupo de corresponsales a acompañarlo a bordo del avión, lo cual no es un asunto menor si consideramos que es el avión más importante del mundo cuando lleva a bordo al presidente su identificativo de llamada es “Air Force One”. Sin embargo algunos aprovechan los vuelos para llevarse “souvenirs” y eso incluye casi todo lo que está a su alcance: desde fundas de almohadas, almohadas, mantas, tazas, platos o cubertería, al parecer todo vale.
A la venta por internet por unos dólares
El que quiera llevarse un recuerdo del Air Force One tras su vuelo tiene muchas formas de hacerlo: guardar la tarjeta de embarque exclusiva, solicitar a la USAF un certificado de su vuelo que le será remitido de forma gratuita o hacerse todas las fotos que quiera a bordo, incluso con el presidente si este se presta, cosa que suele suceder en la mayoría de las ocasiones dado que este suele mantener charlas informales con los periodistas durante los vuelos.
Pero quizás lo peor de todo es que los objetos sustraídos han aparecido a la venta por internet, en conocidas páginas de ventas de artículos de segunda mano y por unos pocos dólares. Hay tazas y copas por entre 15 y 20 dólares, cubertería por menos de 10 dólares y también fundas de almohada y certificados de vuelo. También se venden algunos objetos de usar y tirar que normalmente forman parte del kit de amenidades o del catering a bordo y que están firmados por algunos de los presidentes, aunque el valor de todos estos objetos es de apenas un puñado de dólares.
Aunque no es de esperar que se tomen medidas legales, lo cierto es que si las autoridades lo quisieran, podrían comenzar a tomar acciones legales contra las personas que anuncian dichos artículos debido a que técnicamente supone un robo de propiedad federal, no obstante desde la Casa Blanca confían en que esta advertencia sirva de precedente y se dejen de sustraer objetos durante los futuros vuelos con corresponsales antes de que se tengan que implantar medidas más serias.