El pasado 25 de abril, despegó por primera vez el Racer, un nuevo helicóptero de Airbus inspirado en el X3 de Eurocopter (ahora Airbus Helicopters) que realizó su primer vuelo en un ya lejano 2010.
Racer de Airbus Helicopters
Por supuesto entre el Racer y el X3 hay numerosas diferencias y sus objetivos realmente son diferentes. El X3 rompió el récord de velocidad en 2013 al alcanzar una velocidad en vuelo nivelado de 473 km/h. El Racer pretende ser una base más sostenible, pero con una velocidad de crucero superior a los 400 kilómetros por hora.
Este helicóptero ha sido desarrollado por nada menos que 40 socios de 13 países en el marco del proyecto Clean Sky 2 y su construcción final tuvo lugar en Marignane, Francia. El helicóptero dispone de la última tecnología en sistemas, así como en materiales compuestos. Dispone de dos motores Aneto-1X desarrollados en colaboración con Safran Helicopter Engines que disponen de un curioso sistema híbrido-eléctrico que les permite apagar uno de los motores en crucero para ser más eficiente.
La aerodinámica también juega un papel fundamental, por lo que en total la reducción del consumo de combustible en este helicóptero se sitúa en un 20%. El vuelo del pasado 25 de abril es solo el primero de una campaña que durará dos años durante la cual se demostrará las capacidades de esta aeronave. Durante sus primeros 30 minutos en el aire, se han comprobado los sistemas básicos del helicóptero y sus controles durante el vuelo.
Un sinfín de posibilidades
Si finalmente el Racer sale adelante como proyecto y pasa a una etapa de comercialización, las posibilidades de este helicóptero de alta velocidad serían prácticamente ilimitadas dado que podría ser utilizado para muchas aplicaciones diferentes.
Su despegue y aterrizaje vertical, como todo helicóptero, le confieren una gran versatilidad, pero su velocidad punta cercana a la de un avión convencional a hélices lo harían único en el mercado, siendo un helicóptero perfecto para evacuación médica. También tendría un buen uso como helicóptero militar para incursiones a alta velocidad de los equipos de élite.
Y, por supuesto, como helicóptero de transporte, especialmente para ciudades muy congestionadas como Sao Paulo donde el uso de un helicóptero puede ahorrar varias horas de atasco.