Desde el comienzo de la «operación especial en Ucrania de 4 días de duración», se ha visto especialmente al bando ruso utilizar equipamiento muy curioso en múltiples ocasiones, un equipamiento para nada estándar, más bien casero y muchas veces improvisado.
Neumáticos sobre aviones rusos
Pero, en este artículo nos vamos a centrar en algo muy curioso que se da casi desde el principio de esta guerra y esto son son neumáticos viejos sobre aviones rusos. A lo largo de estos tres años, se han visto neumáticos sobre una gran variedad de aviones, desde los TU-95 a los TU-160 y también cazas y bombarderos de última generación rusos. Para ello existen dos teorías, por supuesto, no confirmadas por las autoridades rusas.
La primera teoría es que estos neumáticos sirven para confundir a los sistemas de detección de aeronaves en caso de ataques. Los sistemas de búsqueda y fijación de objetivos utilizan formas muy bien definidas con diferentes variantes para poder identificar esos aviones a diferentes horas del día, desde diferentes ángulos y también en condiciones de más o menos visibilidad. Esta es también una de las primeras guerras donde se ha empleado la IA, por lo que se cree que los rusos podrían usar neumáticos sobre los aviones para intentar engañar a estos sistemas.
El uso de los neumáticos podría ser una forma muy rudimentaria para intentar engañar a los sistemas de detección, especialmente a aquellos diseñados por inteligencia artificial. Otros países ya están trabajando con telas que confunden a las cámaras, haciendo que el avión se camufle con el suelo del aeródromo y devolviendo así una imagen falsa de lo que realmente hay. Pero esta es una tecnología mucho más avanzada y que no está al alcance de todos los ejércitos.
La guerra del futuro: drones
Por otra parte, la otra teoría con la que se trabaja para intentar averiguar el verdadero uso de neumáticos viejos sobre algunos de los aviones más caros de la flota rusa tiene que ver con el medio que ha dominado, sin duda, esta guerra: los drones.
En esta guerra ha sido la primera vez que hemos visto de forma muy extendida el uso de los drones: aparatos pequeños, casi indetectables, sencillos de operar y con capacidades suficientes para infundir un gran daño en el rival, tanto sicológico como físico. Esto se ha visto también en el último ataque cuando Ucrania ha atacado buena parte de la flota de bombarderos rusos con drones que cuestan menos de 500 dólares y unas pequeñas cargas explosivas que han sido suficientes para infringir un gran daño.
Según se cree, Rusia podría estar empleando los neumáticos para intentar que las bombas lanzadas por drones reboten cayendo así lejos de los aviones que serían los objetivos en un principio. Esto puede tener cierta lógica, pero la mayoría de las bombas explotan en el impacto, ya sea sobre los neumáticos o sobre los fuselajes. Además, aunque al principio de la guerra dominaban los cielos los drones cargados con bombas que podían ser soltados, lo cierto es que en los últimos meses han ganado un gran protagonismo los drones FPV que suelen ser más baratos y que explotan a la vez que su carga, por lo que este sistema queda completamente inútil.
Sea cual sea el motivo real (supongo que nunca lo sabremos) por el que los rusos hayan decidido poner neumáticos sobre los aviones, es sin duda una de las imágenes más curiosas que deja esta guerra.