Las sanciones contra Rusia siguen activas y el último episodio ha salido a la luz, cuando Estados Unidos ha prohibido a una compañía turca volar con el B737 MAX a Rusia.
Poder de imposición
Las sanciones internacionales en nuestro mundo, aunque son muy variadas y van dirigidas a sectores muy concretos o a otros más generales, están impuestas por los propietarios de los bienes sobre los cuales hay una imposición, es decir, los que deciden son aquellos que fabrican los bienes, independientemente de quién los compra.
En el caso que nos ocupa, Estados Unidos se reserva el derecho de uso de toda la tecnología que sale del país, en este caso del B737 MAX. Está claro que los EEUU no pueden prohibir físicamente que una aerolínea vuele a un determinado lugar con un avión, pero si la puede amenazar con imponerle sanciones.
Y no se trata de sanciones precisamente económicas, sino que pueden ser también de otras índoles como, por ejemplo, la prohibición de obtener más piezas de recambio, prohibición de obtener actualizaciones para los aviones, entrenamiento para pilotos, TCP y TMAs, etc. Y está claro que nadie se quiere poner en contra en primer lugar a un gigante como Estados Unidos y en segundo lugar a alguien que puede prácticamente paralizar las operaciones diarias de una compañía.
El por qué de las sanciones
En este caso, las sanciones irían contra la compañía turca Southwind Airlines, una aerolínea creada en 2022 con el objetivo de transportar a turistas rusos hacia los principales destinos de descanso de Turquía, pues no olvidemos que Turquía es el único país de Europa que no tiene imposiciones de vuelo a aviones rusos así como tampoco tiene imposiciones de paso especiales para ciudadanos de este país.
Aunque no se ha especificado el motivo de dichas sanciones, puede estar motivado por dos intenciones principales: la primera es la de entorpecer lo máximo posible la economía rusa en todos sus aspectos, incluyendo la posibilidad vacacional de sus habitantes. El segundo motivo podría ser el de evitar la entrada de piezas del B737 MAX a Rusia.
Alternativas para Southwind
La compañía, que trabaja principalmente para una agencia de viajes en concreto, ha tenido que subcontratar a otras compañías que disponen de otros modelos, dado que Southwind solo posee 8 aviones, siendo 3 de ellos el B737 en su variante MAX8 que son propiedad del lessor Air Lease Corporation.
© Dirk Grothe
Sin duda, esta decisión supone un importante problema para la compañía, que tiene en Rusia su mayor mercado con nada menos que 12 destinos diferentes. Además, esta decisión viene en plena temporada de verano cuando hay más demanda de vuelos.
Recientemente hemos visto un ejemplo claro de como se burlan las sanciones internacionales cuando Irán se ha hecho con nada menos que los dos antiguos A340 presidenciales franceses. El artículo íntegro está disponible en este enlace.