A Boeing le ha aparecido un nuevo problema, de boca de uno de sus ingenieros que ha decidido hace pública una denuncia contra el constructor norteamericanos por procesos supuestamente indebidos en la fabricación de los Boeing 777 y 787 que él mismo habría supervisado.
Aviones de Boeing con defectos de fabricación
Sam Salehpour, un ingeniero de Boeing, ha sido recientemente entrevistado por el New York Times tras denunciar ante la FAA el pasado mes de enero varias preocupaciones sobre la calidad de los 777 y 787.
El ingeniero ha expresado sus dudas sobre pequeños huecos en las uniones de diferentes partes del fuselaje de los 787 que recibía el fabricante norteamericano de parte de diferentes fabricantes de todo el mundo. Debido a este problema, Boeing tuvo que detener las entregas de los 787 por orden de la FAA, sin embargo Boeing diseñó una solución y las entregas fueron reanudadas. Pero, según el ingeniero, la solución consistía en utilizar demasiada fuerza para unir las partes del fuselaje para hacer como si los huecos no existieran antes de medir.
Como los huecos no eran medidos correctamente, no se utilizaban siempre calzas para insertar en estos espacios, por lo que, según este ingeniero, podría causar un «fallo catastrófico» debido al exceso de fuerza de los paneles. Este problema estaría presente «en más de 1.000» unidades del 787, es decir, la práctica totalidad de los aviones dado que hasta la fecha se han fabricado 1.123 unidades de este modelo.
El otro problema estaría en los 777, avión al que fue trasladado Sam Salehpour después de su trabajo en el 787. Según el ingeniero, observó «graves desalineaciones cuando las principales piezas del fuselaje se unían, no midiendo los espacios y aplicando demasiada fuerza para hacer que encajen». Según él, vio «literalmente a gente saltando para unir las piezas». Según sus declaraciones, unos 400 aviones de este modelo estarían afectados por este problema.
Investigación de la FAA
La FAA ya ha anunciado que comenzará a investigar estas denuncias y ya ha llamado para declarar a Salehpour, mientras que el Senado ya ha abierto una audiencia del Subcomité Permanente al que Sam ya ha sido llamado a declarar.
También está llamado a declarar David Calhoun, actual CEO de de la compañía hasta finales de año cuando abandonará la dirección de la empresa. Todo esto llega en un momento de seria preocupación pública sobre la calidad de la fabricación de los aviones del fabricante de Seattle y su cultura de seguridad, algo que ha vuelto a quedar en entredicho después del incidente de enero. En estos momentos las acciones de Boeing cotizan en mínimos, habiendo cerrado la jornada en 173 dólares por acción. Cabe recordar que Boeing comenzó el año cotizando a 251 dólares por acción, su máximo en 4 años.