El CEO de la aerolínea nacional georgiana, Georgian Airways, ha declarado recientemente persona non grata a la presidenta del país, Salome Zourabichvili, tras llamar esta al boicot contra la compañía por reanudar los vuelos a Rusia.
Después de una prohibición de 4 años y un duro visado que los ciudadanos georgianos debían obtener, el Kremlin ha decidido levantar la prohibición de vuelos directos entre Rusia y Georgia en un afán más de interferir en el gobierno de este país, dado que Rusia ya posee tropas en dos regiones del mismo. La compañía nacional, Georgian Airways que actualmente es de capital privado, ha decidido reanudar los vuelos en medios de fuertes protestas de la gente. La presidenta del país no se quedó atrás y llamó al boicot a la compañía por su decisión de acercarse a Rusia.
La respuesta no tardó en llegar y el CEO de la compañía aseguró que estas declaraciones van en contra de la gente, así que ha declarado a la presidenta persona non grata y le prohíbe subir a bordo de sus aviones hasta que se disculpe con la población, algo que no parece que vaya a ocurrir.
Esta decisión también ha sido criticada por la Unión Europea, que a su vez sigue manteniendo un férreo control a los vuelos entrantes y salientes desde Rusia y que, desde el comienzo de la invasión, se han producido con cuentagotas. Exceptuando algún vuelo de repatriación diplomático y de transporte urgente de Uranio, no se ha producido ningún vuelo entre Rusia y el territorio europeo.