Argentina lleva muchos años intentando conseguir un avión de caza que permita cubrir las necesidades defensivas del país. Los Lockheed-Martin A-4AR, los Tucano, los Pucará y los Pampa no son suficientes para todo el país. Pero, siempre se ha encontrado con un viejo enemigo…Reino Unido.
Una última compra fallida y oferta china
Hace no muchos años, Argentina compró varios aviones Super Etendard Modernisé para ser “el nuevo avión” punta de su flota. Siendo sinceros, se trataba de un avión bastante antiguo comprando a la desesperada, pues pocas opciones más había. Sin embargo, estos aviones no hay volado aún en territorio argentino ni lo harán, porque finalmente Reino Unido ha conseguido vetar una pieza clave por lo que los aviones no pueden volar. Os lo hemos contado de forma detallada en este artículo.
En 2022, Argentina se debatía entre varios candidatos: el F-16 de segunda mano, el JF-17 chino, el HAL Tejas indio y el MIG-35 ruso. Siendo sinceros, el HAL Tejas no tendría muchas oportunidades de convertirse en el avión elegido por varias cuestiones, siendo una de las más importantes la logística para proveer de piezas necesarias al avión. Y el MIG-35 bueno, obviando la situación rusa actual, desde 2016 solo se han producido 6 unidades, así que el país no tiene capacidad alguna de fabricación de este modelo, menos aún ahora.
Pero, el JF-17 chino si que tenía opciones de ser seleccionado, de hecho al parecer ya en 2022 Washington paralizó la compra del avión haciendo uso de su extensa diplomacia con los argentinos. Que un aliado como Argentina tuviera un avión chino sería considerada una derrota muy importante para los EEUU y solamente permitiría al país asiático extender sus influencias.
Argentina con F-16 y P-3 Orión
Estos aviones están ahora un paso más cerca de llevar las escarapelas argentinas, puesto que la administración de Joe Biden ha solicitado al Congreso la aprobación de tecnología militar por parte de terceros a un país extranjero, un paso crucial para que finalmente y a través del DoD se dé el visto bueno para la venta.
Pero los F-16 no son norteamericanos, sino daneses. Más en concreto, la venta se podría llevar a cabo por seis unidades del F-16 Block 10 y 32 aviones Block 15 que actualmente Dinamarca quiere vender. En cuanto a los P-3 Orión, provendrían de la Real Fuerza Aérea Noruega. El valor del contrato por los F-16 podría ser de unos 339 millones de dólares, mientras que por los aviones de vigilancia marítima se pagarían 108 millones.
Y es que aunque no sean aviones norteamericanos, los Estados Unidos se reservan el derecho de decisión de cualquier venta de tecnología norteamericana entre países socios, por supuesto. Por tanto, cualquier venta entre terceros tiene que pasar primero la aprobación del DoD (Departamento de Defensa) y una comisión del Congreso.
Todavía no está todo hecho
Si finalmente las ventas de estos dos países de los aviones a Argentina obtienen la luz verde, cosa que todo hace indicar que sí, aún falta superar dos escollos muy importantes: la parte monetaria y el bloqueo del Reino Unido.
Está claro que Argentina no pasa por su mejor momento económico, por lo que la adquisición de estos aviones supondría un impacto importante a las arcas públicas y a la asignación de defensa.
Por otro lado, está Reino Unido. Si no ha intentado sabotear la compra, pronto lo hará. Aunque, también cabe la posibilidad de que Estados Unidos haya llegado a algún tipo de acuerdo con uno de sus más antiguos y mejores socios para permitir esta venta, pues ante todo el objetivo principal es frenar a China.