Una demanda un tanto inusual ha llegado a los tribunales indios por parte de un piloto de IndiGo, que ha demandado al gobierno indio para que se le permita llevar a bordo de los aviones un cuchillo religioso.
El piloto de IndiGo contra la DGCA y el Gobierno
El pasado 11 de diciembre, el tribunal superior de Bombay (India) avisó al Ministerio de Aviación Civil, a la autoridad civil del país DGCA y a la CISF de una demanda en su contra interpuesta por parte de un piloto de IndiGo.
Según este aviso, el piloto de IndiGo se habría escudado en el artículo 25 de la Constitución de la India en la que se deja claro que cualquier persona tiene derecho a expresar libremente su religión, por lo que pide poder portar a bordo de los aviones un cuchillo conocido como kirpán, un objeto que portan los sijes ortodoxos sobre un cinturón. Aunque es un cuchillo curvo de pequeñas dimensiones, no deja de ser un arma blanca que ha sido prohibido en numerosos lugares, no solo en la India, sino en todo el mundo.
Un problema de seguridad
El año pasado, la DGCA autorizó a los pasajeros nacionales a portar este cuchillo siempre y cuando la hoja del arma no midiera más de 15 centímetros. Por ejemplo, en España está prohibido llevar este tipo de armas en los aviones e incluso por la calle si la hoja supera los 11 centímetros.
A comienzos de este mismo año, la DGCA también permitió a los trabajadores aeroportuarios llevar este arma durante sus jornadas laborales con la misma condición que a los pasajeros referente al tamaño de la hoja.
Lo que este piloto demanda ahora es que se emita una directiva por parte de la DGCA que también permita a los pilotos llevar este cuchillo, basándose en que ya se les permite a los pasajeros y a los trabajadores aeroportuarios. Pero, sin entrar en la religión o el simbolismo que puede tener este objeto, entrar con un cuchillo tan grande a un avión es realmente peligroso no tanto por la persona que lo porta, sino porque puede ser sustraído por otra persona y ser utilizado con otros fines.
La decisión está ahora en manos de la justicia india sobre si obliga o no a la DGCA y al gobierno a modificar la normativa vigente para permitir a los pilotos llevar a bordo este objeto. También cabe la posibilidad de que la propia DGCA se adelante al veredicto y lo permita, siguiendo sus decisiones del año pasado respecto a los pasajeros y las decisiones de este año respecto a los trabajadores aeroportuarios.