El pequeño Fokker 100 ha estado volando para las aerolíneas europeas desde su entrada en servicio a finales de los años 80. Ahora, la última aerolínea que lo operaba, la rumana Carpatair, ha retirado este icono holandés de los cielos, que ya solo se encuentra en operación en Europa con el gobierno eslovaco como avión VIP.
Breve historia del Fokker 100
El Fokker 100 es un desarrollo del F28 con un fuselaje más alargado, diseñado en los años 80 por el desaparecido fabricante holandés de aviones Fokker. Habiéndose anunciado en 1983, el programa se desarrolló a toda prisa y el avión realizó su primer vuelo en 1986, obteniendo el Certificado de Aeronavegabilidad un año (menos 10 días) más tarde.
El grupo Air France – KLM fue uno de los principales usuarios, con más de 45 unidades operativas, aunque American Airlines y TAM los superaba con 75 y 50 aviones, respectivamente. El avión entró en servicio el 3 de abril de 1988 con la aerolínea Swissair, quien fue el cliente de lanzamiento. El avión se produjo entre los años 1986 y 1997, con un total de 283 unidades.
Carpatair y el último Fokker 100
La aerolínea rumana Carpatair se fundó en el año 1999 en el aeropuerto de Timisoara, al oeste del país. Comenzó operando los pequeños Saab 340 y años más tarde los Saab 2000. Los primeros aviones a reacción que incorporó fueron los Fokker 100 y más tarde los Fokker 70.
Años más tarde, la aerolínea incorporaría también los ATR 72-500, dos Boeing 737 de la serie 300 (Classic), un único BAE 146 Avro RJ y los actuales Airbus A319 CEO.
La compañía se declaró en quiebra en el año 2014, acogiéndose a un proceso de reorganización parecido a la Ley de Quiebras norteamericana, lo que permitió a la aerolínea reorganizarse para sobrevivir, dejar las rutas regulares y centrarse como aerolínea chárter ad-hoc y ACMI, es decir, alquiler de avión con tripulación o wet-leasing.
El último Fokker 100 de la aerolínea ha sido el YR-FKB, un avión que realizó su primer vuelo el 27 de noviembre del año 1991 y que fue entregado a American Airlines el 30 de diciembre de ese mismo año. En 2004 pasó a la canadiense Jetsgo y desde el 17 de agosto del 2005 vuela para la compañía rumana, aunque entró en servicio un año más tarde.
El 29 de noviembre, Carpatair realizó una ceremonia especial para despedir a su último Fokker 100 tras casi dos décadas en la compañía. El avión voló desde Timisoara hasta el aeropuerto de Bergen op Zoom Woensdrecht, en Países Bajos, donde ha sido almacenado. Su destino es incierto, pero si no encuentra ningún operador es probable que acabe desguazado.