Puede que el 787 de LATAM no esté siendo desguazado, sino arreglado

En los últimos días, han aparecido varias fotos del 787 de LATAM sin el estabilizador vertical, informado de que sería desguazado. Pero, puede ser que no sea así. 

Incidente con el 787 en mayo

El pasado 4 de mayo de 2023, el Boeing 787-8 de LATAM con matrícula CC-BBF sufrió daños severos en el fuselaje cuando era remolcado en el aeropuerto de Bogotá (Colombia).

El último vuelo realizado por este avión, según RadarBox, fue el LA578 desde Santiago de Chile hasta Bogotá y probablemente estaba siendo remolcado en el aeropuerto colombiano para reposicionarlo para el vuelo de vuelta. En ese momento, el vehículo tractor perdió el control y acabó debajo del avión, por suerte, el operario pudo salir a tiempo del avión.

La parte baja del fuselaje sufrió daños considerables, con varios agujeros profundos causados por el vehículo tractor. En estos casos de giro excesivo, también hay que comprobar obligatoriamente el tren de aterrizaje delantero que, como es sabido, tiene un límite máximo de giro.

Quizás haya una segunda oportunidad

El 787-8 implicado en el accidente tiene actualmente una edad de 9,2 años, habiendo realizado su primer vuelo el 9 de junio de 2014. Ha sido el 787 número 185 producido y siempre ha volado para LATAM Chile. Está impulsado por dos motores Rolls Royce Trent 1000 y tiene una configuración interior de dos clases con 30 butacas en business y 217 asientos en economy.

El 787-8 de LATAM siendo desguazado en Bogotá
El 787-8 de LATAM siendo desguazado en Bogotá. Foto: José Luis Valencia

Hasta el incidente de mayo, el avión había acumulado menos de 1.600 ciclos de vuelo y unas 10.000 horas en el aire. En términos aeronáuticos, esas cifras indican que el avión está prácticamente nuevo, por lo que le queda mucha vida por delante. Aunque sea del lessor AerCap, es improbable que sea desguazado.

Al avión, que aún se ubica en Bogotá, se le ha retirado cuidadosamente el estabilizador vertical. Esto se hace durante las reparaciones a muy largo plazo para retirar peso de la cola del avión y poder trabajar mejor en el fuselaje, además de para evitar las inclemencias meteorológicas (si la reparación se realiza en el exterior) o para que el avión entre en hangares más pequeños, si no se dispone de las instalaciones adecuadas para su reparación.

Además, por las imágenes filtradas, se puede ver que las ventanas del avión y las puertas están correctamente preservadas, un símbolo de que el avión es todavía apreciado pues ese trabajo cuesta un dinero y no se haría generalmente si el avión va a ser desechado, dado que las ventanas laterales no se suelen aprovechar para otros aviones.

Siendo un 787 con tan pocas horas de vuelo y tan corta edad en años, es todavía un avión muy valioso para desguazarlo a pesar de la indemnización ofrecida por la aseguradora del vehículo tractor. 

Otro factor que nos indica que es probable que no sea desguazado, es que antes de retirar el estabilizador vertical (que puede ser vendido de segunda mano), primero se retirarían flaps, spoilers, slats y superficies de control de las alas con el objetivo de introducirlas al mercado de segunda mano, algo que en este caso no ha pasado todavía, lo que puede indicar que quizás el desguace no sea el objetivo de estos trabajos.

Y, por último, las piezas más caras de cualquier avión son los motores. Estos elementos son los primeros que se retiran para desguazar un avión (más aún si es un avión tan nuevo) y este 787 aún conserva los dos motores lo que, de nuevo, puede hacer pensar que será reparado.

Otro antecedente de una larga reparación de un 787

En julio de 2013, un Boeing 787-8 (LN 44) de Ethiopian Airlines con matrícula ET-AOP sufrió un incendio a bordo mientras estaba en el aeropuerto de Heathrow. No hubo heridos, pero el fuego causó importantes daños en el fuselaje y el interior del avión. Las causantes eran las famosas baterías japonesas de los 787 que posteriormente fueron sustituidas por otro modelo.

El caso es que el 787 sufrió daños en su parte trasera por lo que en este caso concreto, si era necesaria la retirada del estabilizador vertical, pero no le fueron retiradas otras piezas, igual que al avión de LATAM. Como el espacio en Heathrow es muy reducido, se optó por una reparación exterior, por lo que alrededor del avión se montaron unas carpas y la reparación duró nada menos que 5 meses.

Una vez llevada a cabo la reparación, el avión realizó varios vuelos de prueba y fue certificado de nuevo por las autoridades competentes. Se reincorporó al servicio en diciembre de ese mismo año y a día de hoy sigue volando para Ethiopian Airlines.

Claro que en el momento del incidente del 787 etíope, el avión tenía menos de un año de antigüedad, pero al avión chileno le quedarían todavía fácilmente entre 10 y 15 años de servicio, por lo que su reparación y vuelta al servicio es posible. El tiempo dirá.

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