Varios medios se han hecho eco de que un piloto de Lufthansa ha dibujado un “pene” a modo de protesta o porque estaba molesto por tener que desviar el vuelo. Pero no, estas cosas no pasan.
Vuelo
Los hechos ocurrieron durante el vuelo LH306 del pasado 28 de julio. Lufthansa operó este vuelo entre Frankfurt y Catania con el Airbus A321 con matrícula D-AIDW. El vuelo salió con un poco de retraso,a las 15:01 hora local y tras dos horas de vuelo llegó al aeropuerto de Catania donde realizó la aproximación a la pista 08.
Debido a los vientos cambiantes típicos de este aeropuerto que se encuentra cercano al mar, el avión realizó un go around (motor y al aire) y tras una corta espera de 20 minutos, se alineó para intentar aterrizar por la pista contraria, la 26.
Sin embargo, el intentó no tuvo éxito y el avión se volvió a ir al aire, desviándose ahora sí al aeropuerto de Malta, donde tomó tierra media hora después. Así que realmente el “dibujo” se realizó antes de que el piloto supiera que se iba a desviar, porque la espera tuvo lugar antes del segundo intento de aterrizaje y por tanto, antes de que pudiera estar “cabreado” por tener que desviarse (lo cual repetimos una vez más, es una tontería).
Después de dos horas y media en Malta, el mismo avión volvió a despegar y esta vez si pudo aterrizar por la pista 26.
Lufthansa ha salido a defender al piloto
Pero es que ni hacía falta. La compañía ha defendido que la forma que se puede ver como resultado del patrón de vuelo ha sido completamente “al azar” y que el piloto no lo hizo con la intención de dibujar esa forma en concreto por que estuviera cabreado por tener que desviarse a Malta, como algunos medios han dicho.
Lo que, repetimos, ni hacía falta aclarar. Los pilotos de aviones comerciales no deciden libremente por dónde quieren volar, sino que siguen unas pautas muy claramente establecidas y si estas no se adecúan a sus necesidades, son los controladores de tráfico aéreo los que en colaboración con la tripulación les ofrecen vectores para llevar a cabo esos vuelos.
En este caso, más arriba en este artículo se justifica la actuación del piloto y lo que ha pasado, pero por si acaso dejemos claro que el piloto no lo ha hecho a propósito y que los desvíos a aeropuertos alternativos son situaciones previstas desde antes de que salga el avión desde el aeropuerto de origen, es solo una de las muchísimas medidas de seguridad y precauciones que se toman a la hora de operar un vuelo comercial.
Esto no queda más que en una anécdota y esperemos que no pase de ahí, más que reconocer la profesionalidad de la tripulación del avión de Lufthansa que actuó correctamente ante una meteorología adversa así como del control de tráfico aéreo de Catania y del FIR de Roma.