Los C-160 Transall alemanes tendrán una segunda vida

Algunos C-160 Transall tendrán una segunda vida en Australia, desempeñando un papel diferente al que venían haciendo en la Lufthwaffe.

Breve historia de los C-160 Transall

En 1957, con una Europa ya algo más recuperada de la II Guerra Mundial, Francia y Alemania (occidental, claro) empezaron a pensar que necesitarían un nuevo avión carguero militar y que sería un buen incentivo a las economías si lo desarrollaran de forma local, sin tener que adquirirlo a los Estados Unidos que, por aquel entonces, ya ofertaban el nuevo y flamante C-130.

Un C-160 Transall alemán aterrizando en Albacete
Un C-160 Transall alemán aterrizando en Albacete

Se formó entonces una empresa conjunta llamada Transporte Allianz, formada por la Nord Aviation, la compañía Weser-Flugzeugbau, W. Blume Leichtbau y Hamburger Flugzeugbau. Aunando fuerzas, consiguieron que en 1963 este avión realizara su primer vuelo.

Durante 20 años, desde 1965 hasta 1985, se han producido 214 ejemplares de los cuales 110 fueron para la Fuerza Aérea Alemana y 78 para la Fuerza Aérea Francesa. También operó en otros países (principalmente unidades de segunda mano) y también tuvo unos pocos operadores civiles como avión de carga, entre los que se destaca Air France.

Todo llega a su fin

En 2021, después de 6 décadas de fiel servicio a Alemania, el C-160 Transall se despedía cuando las últimas 6 unidades fueron retiradas de servicio. Alguno ha acabado en algún museo, pero la mayoría han sido desguazados o vendidos como aviones de segunda mano que, probablemente ya no están volando. 

Sin embargo, los últimos 3 aviones fueron vendidos a la compañía Wieland Aviation, una empresa australiana que los utilizará como avión apagafuegos. Y es que el C-160 puede transportar hasta 16 toneladas, lo que lo hace perfecto para llevar un equipo interno para almacenar agua (o retardante) y su buena autonomía de casi 2.000km a máxima carga, permite que pueda llegar a zonas alejadas de Australia en poco tiempo.

Wieland Aviation Group C-160D Transall VH-RPR

Antes de ser enviados a Australia, los aviones han sido sometidos a una importante puesta a punto, aunque la conversión o la instalación de los equipos antiincendios se realizará en Australia por la propia empresa que los operará.

Para llegar a Australia, han sido necesarios un total de 8 vuelos, cubriendo la distancia total en algo más de 4 días, considerablemente menos que los tiempos de entrega de los ATR de Air New Zealand, tal y como os hemos contado en este artículo.

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