El AN-124 de Volga-Dnepr finalmente es incautado por Canadá

El pasado 17 de abril, el gobierno canadiense dijo que iba a embargar el AN-124 que se quedó en Toronto y que este avión sería donado a Ucrania. Pero decirlo es más fácil que hacerlo, finalmente la decisión oficial ha llegado.

Atrapado en tierra

Por todos es sabido que la invasión rusa a Ucrania comenzó el 24 de febrero de 2022 y de forma casi inmediata, las sanciones internacionales hicieron acto de presencia y aunque todas fueron bastante iguales, cabe recordar que cada país es soberano así que tiene libertad de introducir dichas sanciones cuando lo considere, si es que lo considera.

Una de las primeras sanciones fue la del cierre del espacio aéreo a los aviones que operaban para alguna persona física o jurídica rusa. Esta medida fue tomada de forma casi instantánea en la Unión Europea, los vecinos más cercanos a Rusia, pero también se tomó en otros países si bien con un poco de retraso.

Me imagino que es este…😬 pic.twitter.com/n9tv9BKKJa

— Willto (@willtorresvilla) April 17, 2023

Este fue el caso de Canadá, que adoptó esta medida el 27 de febrero de 2022, 3 días después de que comenzara la invasión. Así pues, dos horas antes de que el gobierno canadiense aprobase de forma oficial la medida, el Antonov AN-124 con matrícula RA-82078 de Volga-Dnepr Airlines aterrizó en el aeropuerto de Toronto Pearson International, en Canadá. Y lo hizo con tan mala suerte, que cuando se estaba descargando la carga de test rápidos que transportaba desde China la prohibición se hizo efectiva y el avión no pudo volver a despegar.

Así lleva más de un año en tierra, aparcado en el mismo lugar del aeropuerto de Toronto debido a la imposibilidad de volver a despegar, algo que ha solicitado tanto la aerolínea como el gobierno ruso en repetidas ocasiones y que siempre ha sido denegado.

Incautación

Casi de forma inmediata, muchas voces abogaban por la incautación total del aparato, pero las leyes nacionales de Canadá no permiten este tipo de acciones a la ligera. Estas voces se acrecentaron a principios de año cuando quedó claro que la guerra iba a ser una contienda de larga duración, también sin éxito.

El pasado mes de abril, algunas voces provenientes del propio gobierno abogaban por incautarlo, pero ir más allá y donarlo al gobierno ucraniano (quien seguramente lo derive a la compañía Antonov Airlines para que lo pueda operar) como compensación por la destrucción provocada por Rusia en Ucrania que entre otras muchas cosas, también ha destruido el aeropuerto de Hostomel, que albergaba en ese momento al AN-225 (el mayor avión del mundo), al menos un AN-124 que se encontraba en revisión y al AN-22 Antei. Quedando los dos últimos con serios daños y el primero completamente destruido.

Ahora si, el gobierno canadiense ha confirmado que dicho avión queda bajo custodia de Canadá y que se encuentran trabajando con el gobierno ucraniano para explorar todas las vías posibles por las que este avión puede apoyar al esfuerzo bélico ucraniano y también a la compensación de las víctimas y reparación de los daños causados por Rusia.

Por supuesto el avión tiene que recibir una puesta a punto antes de ser devuelto al servicio activo, quizás esta vez si bajo bandera ucraniana. Pues aunque la central de Antonov en el aeropuerto de Hostomel haya quedado completamente destruida, la compañía sigue operando con sus aviones fuera del país, realizando vuelos de carga y de propia ayuda humanitaria y armamentística para Ucrania. Eso sí, no acceden al espacio aéreo ucraniano, sino que van generalmente hasta Polonia.

Por supuesto, tampoco acceden al espacio aéreo ruso durante sus vuelos.